VINO Y PÓLVORA

SINOPSIS

Un magnate del vino aparece asesinado en su despacho. Una niña rumana perteneciente a una comunidad de inmigrantes que trabajan para la víctima en la vendimia desaparece sin dejar rastro.

Ante estas noticias, la oficial Annika Kaunda se ve obligada a interrumpir sus idílicas vacaciones en Nápoles y regresar a España para ayudar en la resolución del caso. Su familia decide permanecer en Italia unos días más. Bruno ha descubierto una pista sobre su pasado que no piensa abandonar hasta llegar al fondo del asunto. ¿Murió su padre del modo que siempre le contaron? ¿Quién es en realidad su enigmático tío Giacomo y qué vínculos le unen a la Camorra?

Título: Vino y pólvora

Autor: Susana Martín Gijón

Serie: Annika Kaunda #3

Editorial: Anantes

Fecha de publicación: 11 Abril 2016

RESEÑA

VALORACIÓN: ⭐⭐⭐⭐

¿Qué le pasa a Susana Martín Gijón con los finales de trilogía que siempre consigue que me explote la cabeza? ¡Ya van dos de dos! Si primero fue Camino Vargas y el final de “Planeta” (final que me dejó sin uñas), ahora le ha tocado el turno a Annika Kaunda y el final de serie de “El trébol de cuatro hojas” con “Vino y pólvora”, cuyos últimos capítulos (y esa última frase) suponen un auténtico terremotos, dando un giro de 180º a todo aquello que habíamos leído.

El asesinato de un magnate del vino en Mérida hará que Annika tenga que acortar sus vacaciones en Italia junto a su familia, lo que ocasionará ciertas tiranteces en su relación con Bruno. Mientras ella viaja de nuevo a España para investigar esa muerte y la desaparición de una niña rumana, Bruno permanecerá en Nápoles tratando de averiguar información acerca de su pasado y la muerte de su padre.

Desde la primera entrega de la serie se ha notado una clara evolución tanto en las historias y la forma de integrarlas como en los personajes. Si algo me gusta en una serie es que se note cierto cambio de un libro a otro, y que no se limite a repetir la misma fórmula una y otra vez.

En esta ocasión somos por fin testigos de parte del pasado de Annika y veremos cómo llegó a España. El hecho de tener que enfrentarse tan de cerca a su pasado no solo ayudará al lector a conocerla mejor, sino que provocará en ella consecuencias impredecibles.

Si hay un personaje que ha experimentado un cambio a lo largo de la serie ese es Bruno. A pesar de que en esta tercera entrega su presencia es algo menor que en las anteriores, su trama será el detonante que hará que tanto su vida como la de Annika salten por los aires.

Una vez más la autora aprovecha sus crímenes para hacer denuncia social, con una historia comprometida con los conflictos de la social actual y que nos lleva a plantearnos hasta qué punto el fin justifica los medios en determinadas ocasiones.

Buen cierre para una trilogía que además de entretener te hará reflexionar.